Cuaderno de bitácoras de Merak - Capítulo uno

Siempre he pensado que viajar cerca de un Quásar no me destruyó, me enorgullezco de salir viva, sin duda fue toda una aventura. Pero quizá es ahora cuando después de viajar durante más años en soledad, en esta pequeña gran nave, me empiezo a plantear que quizá sí lo haya hecho.

Aquel Tabby con el que me encontré al alejarme del Quásar y su impacto sigue siendo el mayor misterio con el que me he encontrado.. el lugar que más recuerdo y al que aún visito siempre que las coordenadas me acompañan. Los años me ayudan a disfrutar más de él, sé que en el peor de los casos me enseñará algo nuevo.

Me arrepiento de no haber disfrutado realmente de aquella estrella, su rareza y lo que desconozco de ella sigue aún en mi cabeza. Pero en mi mente tenía a aquella estrella fugitiva a la que conseguí viajar varios años después.

Pero es ahora, cuando me planteo el daño que me pudo hacer el Quásar... cuando decido a dejar constancia de ello. Durante años, al salir del Quásar, me negué a volver a encontrar más humanos, y puede que ahora... me planteé la idea de que me gustaría encontrar vida.

A lo largo de este viaje, el sólo parar en estrellas más fáciles de contemplar desde entonces... hasta ahora lo había visto como parte de mi. Vivir con facilidad, sin complicaciones ajenas a mi. Aquel viaje fugaz por una enana blanca, mi parada en una estrella fundamental... me dio una gran sensación de control. ¿Falsa tal vez? Hasta ahora siempre había conocido la respuesta a esa pregunta. Tal vez ahora... piense estar equivocada todos estos años, haber elegido un rumbo incorrecto desde el Tabby... lo sé. Y después de vivir estos años bajo esa idea...  contemplar la posibilidad de haberme equivocado creo que me destruye un poco.

He vivido tanto tiempo contemplando tantas estrellas lejanas, recuerdo contemplar aquella protoestrella y tener una sensación total de entendimiento y control. Incluso mi viaje después cerca de aquella estrella oscura.. ¡pensar que las dábamos por desaparecidas, fue genial!

Puede que después de todo eso... mi parada inesperada viendo una enana azul me descolorara un poco, me volviera a hacer cambiar el rumbo. Envolverme en la estela de una estrella fugitiva, algo que esperaba desde estar cerca del Tabby. Entender en cierto modo que necesitaba regresar.

Puede que cierta melancolía de aquel momento volviera a hundirse ante aquella estrella intergaláctica, aún no sé si pasé demasiado tiempo en aquel lugar y si muchas cosas que me planteo ahora comenzaron entonces.

Mi último viaje a un gemelo solar me hace terminar de plantearme ciertas decisiones que he mantenido o reafirmado durante todo el trayecto. Sentía paz en mis viajes, ahora siento soledad y algo más... siento que no sé cómo cambiar eso. Puede que al final mi decisión de aceptar este trabajo sea más duro que yo. Pero mi única herramienta hasta ordenar todas estas ideas es este cuaderna de bitácoras a medio usar... si bien me negué a usarlo para dejar constancia de mi día a día, creo que debo empezar a dejar constancia de las sensaciones de mis viajes. Aún no sé si esta será la única comunicación que alcance a tener en un futuro con otra persona, algo que quizá lea mucho después de mi.

Soy Merak, llevo varios años viajando por el espacio y si estás leyendo esto puede que sea porque por fin haya encontrado a alguien o porque tu me hayas encontrado a mi.